15) Síndrome de Tourette

 

Esta entrada del blog está dedicada a las discapacidades, en este caso al Síndrome de Tourette.

El síndrome de Gilles de la Tourette es un trastorno caracterizado por movimientos repetitivos o sonidos indeseados (tics) que no se pueden controlar con facilidad. Por ejemplo, la persona afectada puede de manera repetida parpadear, encoger los hombros o emitir sonidos raros o palabras ofensivas.

En general, los tics se presentan entre los 2 y los 15 años (el promedio es alrededor de los 6 años), y suelen disminuir o controlarse después de los 10 años. Los hombres tienen entre tres y cuatro veces más probabilidades que las mujeres de desarrollar el síndrome. Si bien no tiene cura, se puede tratar.

Por lo general, la gente asocia este síndrome con la exclamación de palabras obscenas o comentarios socialmente inapropiados y despectivos (coprolalia), como ocurre con uno de los personajes de la película de comedia española Toc-Toc. En este filme un grupo de pacientes coincide en la consulta de un eminente psicólogo, todos ellos aquejados de TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo). El personaje interpretado por el actor argentino Oscar Martínez padece el Síndrome de Tourette y no deja de soltar improperios involuntarios toda la película.

La coprolalia es uno de los síntomas más confusos y socialmente estigmatizantes del Síndrome de Tourette. Sin embargo, este síntoma está solo presente en una pequeña minoría de afectados.

 

Dificultades escolares vinculadas al síndrome de Tourett

 El síndrome de Tourette no menoscaba la inteligencia, pero puede afectar de muchas maneras al aprendizaje escolar, tanto de manera positiva (mayor creatividad) como negativa (mayor falta de atención).

Los esfuerzos de los niños por controlar sus tics pueden hacer que sus capacidades de concentración y atención disminuyan notablemente. El síndrome de Tourette puede estar asociado al TDA e hiperactividad; en muchos casos, este trastorno aparece antes que los tics. También puede estar asociado al trastorno obsesivo-compulsivo, que también influye mucho en la capacidad de concentración, debido a que genera estrés y ansiedad.

Otro trastorno al que se asocia con el síndrome de Tourette es la depresión y, en general, a los trastornos de estado de ánimo, pues influye tanto en la concentración como en la autoestima, la motivación, la seguridad, etc.

Intervención del profesorado

Los estudiantes afectados con síndrome de Tourette necesitan un apoyo escolar específico. Para ello, tanto los padres como los profesionales de la educación (profesores, educadores, psicólogos, psicopedagogos, entre otros), deben conocer y comprender bien el ST. Esto es necesario para que sepan minimizar la atención y la importancia a los tics del alumno, contribuyendo a la disminución de estrés del mismo y evitándole así mayores conflictos interpersonales. Esta actitud servirá a los compañeros de los niños para que hagan lo mismo y aprendan a tolerar estos síntomas. Con esto se favorece la integración del niño.

También el profesorado debe abarcar las necesidades emocionales, como son la empatía y la comprensión, para disminuir las emociones negativas y para prevenir peleas, burlas, aislamiento y rechazo, entre otras.

 

Para cerrar esta entrada me gustaría destacar la figura de una influencer llamada Lele Pons, quien padece este trastorno. La celebrity venezolana ha hablado abiertamente en varias entrevistas de que padece TOC y Síndrome de Tourette. En clave de humor y sin vergüenzas, explicaba en qué consiste cada trastorno, cómo se manifiestan en su persona y cómo ha sido su proceso de aceptación. Es importante que personajes de gran calado internacional como esta chica den visibilidad a este tipo de padecimientos, pues ayuda a desestigmanizarlos y normalizarlos.

 

 

Webgrafía:

• https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/tourette-syndrome/symptoms-causes/syc-20350465
• https://es.wikipedia.org/wiki/S%C3%ADndrome_de_Tourette